El 4 de febrero, se conmemora la Lucha Mundial Contra el Cáncer y el 15 del mismo mes se reconoce como el Día Internacional del Cáncer Infantil. Esta enfermedad se caracteriza por la proliferación sin control de algunas células y su pronta diseminación a otras partes del cuerpo, que comúnmente se asocia o se nombra con el lugar en el que se origina.

Anualmente, esta enfermedad causa 10 millones de muertes en el mundo y es la segunda causa de fallecimientos globalmente. De acuerdo con Globocan, en el caso colombiano, se reportan 113.221 diagnósticos al año, los cuales se agrupan mayoritariamente en cáncer de mama, seguidos por el de próstata, colon, recto y estómago. 

Por su parte, en el caso de los niños y adolescentes (0 – 19 años), la cifra asciende a los 2.211 casos de cáncer reportados en el país. Los tipos que más afectan a esta población son: leucemia, tumores en el sistema nervioso central, linfoma no Hodgkin, linfoma Hodgkin, cáncer testicular, de tiroides y renal. Según cifras de Estadísticas Vitales de SISPRO esta enfermedad causa 4 muertes en niños por cada 100 mil habitantes.

La EPS Famisanar asegura que “en todos los casos, incluyendo en los menores, el tratamiento a tiempo y la detección temprana del cáncer pueden asegurar la vida del paciente, por lo cual, es necesario realizar consultas ante cualquier señal en el cuerpo de los niños y niñas como bultos, manchas, palidez, sangrados y pérdida de peso, signos de alarma ante un posible diagnóstico de cáncer”. 

Adicionalmente, para prevenir el cáncer se recomienda en los adultos:

  • Evitar el consumo de tabaco y alcohol.
  • Comer saludable siguiendo una dieta balanceada de frutas, hortalizas y verduras.
  • Realizar ejercicio y actividad física.
  • Cuidar los pulmones y el aire que se consume, teniendo en cuenta que la contaminación del aire es un factor de riesgo de cáncer.
  • Vacunarse contra enfermedades como el virus del papiloma humano y de Epstein-Barr, al igual que contra la hepatitis B y C.
  • Mantener un peso corporal adecuado.
  • Evitar la radiación ultravioleta, la exposición al sol y las cámaras de bronceado artificial.

En el caso de los niños, las principales recomendaciones son:

  • Prestar atención a los cambios de pesos, al igual que a los puntos rojos, moretones sin explicación, fiebre persistente y dolor de cabeza.
  • Si hay manchas blancas en los ojos, sangrados, masas en el abdomen, palidez y bultos en cualquier parte del cuerpo.
  • Evitar fumar cerca de los niños y niñas, el tabaquismo pasivo puede ponerlos en riesgo.
  • Usar bloqueador solar especialmente en las horas de alta intensidad.
  • No exponer a los niños a sustancias tóxicas, productos químicos o radiografías en exceso.
  • Para evitar el cáncer oral es importante inculcar en los más pequeños buenos hábitos de higiene dental.

Por último, el tratamiento del cáncer debe realizarse partiendo de un diagnóstico efectivo, puesto que dependiendo del tipo el manejo será especializado entre los que se pueden encontrar las intervenciones quirúrgicas, la radioterapia y la terapia sistémica cómo la quimioterapia, tratamientos hormonales y biológicos dirigidos. La aplicación de este tipo de terapias pueden tener como objetivo curar la enfermedad o prolongar la vida del paciente, en casos de cáncer de mamá, uterino, bucal y colorrectal, hay probabilidades de curación al aplicar las prácticas óptimas, al igual que en el caso de leucemias y linfomas infantiles.