Este gran reportaje narra historias de extranjeros expulsados de Colombia por causa de sus ideas en el siglo XX. Arranca en los años veinte con la irrupción de los movimientos de izquierda y del Partido Socialista Revolucionario tras la Revolución rusa y concluye en los ochenta con la caída del Muro de Berlín, que simbolizó el fin de la Guerra Fría. En un capítulo inédito de su historia, diferentes gobiernos colombianos han expulsado a cientos de extranjeros, que en realidad fueron víctimas de arbitrariedades, de xenofobia, de aporofobia, antisemitismo y, sobre todo, de anticomunismo furibundo, una causa compartida por políticos liberales y conservadores. Los casos documentados mediante expedientes judiciales, archivos de prensa y entrevistas develan dramas e injusticias que aportan a la recuperación de la memoria. 

CASOS INÉDITOS DE DRAMAS E INJUSTICIAS 

QUE NECESITAN SER REPARADAS 

Además de la ilusión de que hablamos el mejor español del mundo, otro de los mitos nacionales más atornillados en nuestra precaria lista de virtudes es la supuesta inexistencia de xenofobia en el espíritu colombiano y sus instituciones. Ese imaginario linaje moral nos autoriza a escandalizarnos por la persecución de extranjeros en otros rincones del mundo. Sí, pues creemos que somos una nación que abre las puertas a los perseguidos y los acoge con generosidad, vieja suposición a la que dio alas una medida encomiable del gobierno de Iván Duque a favor de los inmigrantes venezolanos. Pero si algo demuestra la investigación de la profesora Maryluz Vallejo que contienen estas páginas es que el virus de la xenofobia contagia a Colombia desde hace siglos. 

Prólogo de Daniel Samper Pizano