Tania Moreno de Génesis cuenta cómo aprendió de sus padres a ser rebelde, Elsa Riveros de Pasaporte recuerda el día que fue a cine a Unicentro con Jorge González de Los Prisioneros, Juanes comparte la emoción y frustración que sintió en un concierto de Kraken, Óscar Orjuela de Darkness habla sobre la sorpresa que un día les dio la agrupación Metallica, Tato Lopera de Estados Alterados escribe sobre la ausencia de un integrante del grupo, y Marta Gómez sostiene que a ella la descubrió la gente y que canta para salvar al mundo.

Estas son algunas de las 70 voces que recopila Nación Rebelde | RTVC, libro que expande este proyecto de RTVC Sistema de Medios Públicos, ganador del Premio India Catalina 2023 en las categorías Mejor serie documental, Mejor producción audiovisual musical y Mejor producción transmedia.

Al igual que la serie de televisión y las producciones de radio, la publicación está dividida por capítulos en los que una canción marca el hilo conductor, y esta historia comienza con Me siento loco, como la canción de Los Yetis, que sirve para ubicar al espectador en los años 60 cuando el rock and roll llegó a Colombia y se convirtió en el ingrediente perfecto para retar la realidad.

En casi 200 páginas y 14 capítulos, el relato continúa por las décadas de los 70, 80 y 90, en las que se explora el hipismo, la realidad de la juventud en un país violento, el metal y el punk. Entrando en el nuevo milenio se enfoca en los desafíos digitales, el rap como denuncia social, las raíces como nuevo orden musical, o el poder de las cantadoras, entre muchos otros temas

Nación Rebelde | RTVC, el libro, no es una narración lineal sobre la historia de la música colombiana. Esta publicación parte desde los sentimientos y es una colección de historias escritas en primera persona por diversos protagonistas que, entre anécdotas, recuerdos, confesiones y reflexiones, le cuentan al lector porqué Colombia se ha convertido en una potencia mundial de la industria musical que ha logrado generar cambios y disrupciones en la audiencia, y está abierta en un abanico de sonidos desde el rock pasando por el hip hop, la fusión, el metal, punk, pop y nueva canción colombiana. Artistas, periodistas y diversos integrantes de la industria cuentan cómo se enfrentaron a grandes retos y encontraron en la música la inspiración para trascender y construir una nueva forma de ciudadanía, la de una ‘nación rebelde’. Cabe anotar que en este caso la rebeldía está asociada a la forma de vida que logró hacer propia una expresión cultural extranjera, el rock and roll, y abrió el camino para que la música colombiana y sus protagonistas gocen del reconocimiento que tienen hoy. “Al final del día, la rebeldía musical nos ha hecho mejores, porque en el ideal de país que los jóvenes (de todos los tiempos) han construido y expresado con canciones, con armonías, textos y ritmos, prima una Colombia muy feliz y positiva. Y esta sí que es una realidad más que sugestiva”, expresa Mauricio Tamayo, director de Nación Rebelde | RTVC.