No hay que darle tantas vueltas a la hora de pensar si usar o no un condón. Este es un método de anticoncepción eficaz para prevenir embarazos no deseados e infecciones de transmisión sexual.
A pesar de su amplia efectividad muchas personas aún tienen dudas sobre su uso, conservación y cuidado, por esto Profamilia y Piel, su marca de condones, comparten algunos consejos esenciales para que tu experiencia sea segura, placentera y efectiva:

  1. Verifica la fecha de vencimiento: es importante revisar la fecha de caducidad antes de usar un condón. Si está vencido, es posible que ya no sea efectivo para cuidarte y cuidar a tu pareja, así que no lo utilices para evitar cualquier susto.
  2. Guárdalo con cuidado: los condones deben estar en un lugar fresco y seco, lejos de fuentes de calor y luz directa del sol. No lo dejes en espacios donde se puedan dañar por la presión o la fricción como en las billeteras o en los bolsillos de tu pantalón.
  3. Asegúrate que lo estás usando adecuadamente: como casi todo, el condón también tiene
    una manera correcta de usar: ábrelo sin utilizar los dientes, ubica el condón en la cabeza del pene erecto. Si está circuncidado, primero retrae el prepucio, saca el aire que se encuentra en la punta del condón y desenróllalo hasta la base del pene. Al terminar, sostén el condón desde su base y retíralo cuidadosamente.
  4. Cuando termines debes desecharlo adecuadamente: una vez que hayas finalizado asegúrate de desecharlo de manera segura y responsable. No lo arrojes por el inodoro, deposítalo en un contenedor de basura envuelto en papel higiénico.

Profamilia a través su marca de condones Piel tiene como prioridad protegerte y brindarte
diferentes experiencias dependiendo de tus gustos, para que puedas sentir lo mejor de una relación sexual con seguridad y satisfacción. No es común que ocurran accidentes, esto se debe a un uso incorrecto del preservativo, por eso si el condón se rompe mientras tienes sexo debes tomar en cuenta las siguientes medidas para minimizar cualquier riesgo:

  1. Si sientes que se ha roto: detente, mantén la calma y usa un nuevo condón. Recuerda que
    para disfrutar al máximo es mejor si lo haces con protección.
  1. No entres en pánico y limpia tus genitales: lava inmediatamente con agua y un jabón que
    no altere el pH; así reduces las posibilidades de contraer una infección de trasmisión sexual (ITS).
  2. Comunícaselo a tu pareja: si tu pareja estuvo expuesta es importante que se lo informes.
    Puedes acceder a un método anticonceptivo de emergencia que disminuirá las
    probabilidades de tener un embarazo no deseado.
  3. Habla con tu pareja sobre métodos anticonceptivos: la ruptura de un condón es una buena oportunidad para hablar con tu pareja sobre otros métodos anticonceptivos y encontrar el que mejor se ajuste a las necesidades de ambos.
  4. Cuida tu salud: si el condón se rompió es muy importante hacerte exámenes médicos de
    rutina, pero esta no debe ser la única razón, puedes hacerlos cada seis meses o cada año de acuerdo a las recomendaciones de tu médico de confianza.

Otra de las preguntas más frecuentes a la hora de usar un condón es ¿qué hacer si este se queda adentro? No hay que preocuparse, es importante tomar medidas rápidas para removerlo y minimizar cualquier riesgo de infección. Esto es lo que debes tener en cuenta:

  1. Trata de alcanzarlo con cuidado: puedes tratar de alcanzarlo con tus dedos, especialmente si está cerca del orificio vaginal o rectal. Ten cuidado de no empujarlo más hacia adentro.
  2. No lo dudes y busca asistencia médica: si no puedes remover el condón por tu cuenta, acércate a un lugar donde te den asistencia médica inmediata. Un profesional puede ayudar a removerlo sin causar daño o dolor.
  3. Si intentas retirarlo no uses objetos extraños: no intentes removerlo con pinzas o cualquier otro implemento, ya que esto puede causar daño a los tejidos y aumentar el riesgo de infección.

Desde Profamilia reafirmamos nuestro compromiso de brindar herramientas e información para que todas las personas puedan vivir sus derechos sexuales y reproductivos con mucho placer y seguridad.