Durante el mes de mayo, Bogotá se llena de planes únicos para rendir homenaje a las madres con experiencias gastronómicas llenas de calidez, sabor y buenos momentos. Dos espacios destacados de la ciudad presentan propuestas diseñadas especialmente para este domingo 11 de mayo, con el objetivo de celebrar a mamá como se merece: con comida deliciosa, detalles memorables y una copa del mejor vino de la ciudad.
- Vinos Vivos para mamá:
Ubicado en el corazón de Chapinero Alto (Carrera 4 Bis No. 58-40), Franc Vinos Vivos —referente en vinos naturales y experiencias sensoriales— ha preparado un regalo auténtico y diferente para celebrar a mamá: un pack promocional de vinos muy especial. Una oportunidad ideal para obsequiar algo con alma: vinos únicos que celebran el buen gusto con conciencia. Además, para quienes buscan un plan distinto este domingo 11 de mayo, Franc abrirá sus puertas desde la 1:00 p.m. hasta las 8:00 p.m. para disfrutar de un momento inolvidable, acompañado de buena música, ambiente acogedor y excelentes vinos
- Sabor italiano al horno de piedra:
Para quienes prefieren celebrar al aire libre con buena comida, Cinepolitana Pizza Gourmet (Cra. 13 #93A-23) ofrece una experiencia culinaria que combina la tradición italiana con un toque gourmet contemporáneo. Este restaurante, reconocido por su auténtico horno de piedra italiano, presentará una exquisita variedad de pizzas artesanales elaboradas con ingredientes frescos de la más alta calidad. La oferta se completa con entradas, postres caseros, entre otros.
Con un ambiente acogedor y sofisticado, y una terraza con vistas encantadoras, Cinepolitana se convierte en el lugar ideal para celebrar el Día de la Madre con estilo, sabor y momentos inolvidables
El Día de las Madres es mucho más que una fecha: es una oportunidad para celebrar el amor incondicional Es el momento perfecto para salir de la rutina, explorar nuevos sabores, brindar con una copa especial, dejarse llevar por la música y, sobre todo, compartir sin prisa. Porque más allá de los regalos, lo que realmente importa es honrar lo esencial: estar presentes, agradecer y crear recuerdos que perduren.
