La limpieza diaria es esencial en la vida de las personas, sin embargo, la forma en que se realiza puede tener un impacto significativo en la salud de la piel y cabello. La higiene corporal es un ejemplo de los mitos y creencias desactualizadas del autocuidado. Los dermatólogos médicos adscritos a Colsanitas Arturo Argote y Astrid Ruíz, demuestran la realidad detrás de cinco mitos de higiene corporal y algunas recomendaciones relacionadas.

Uno de los mitos más comunes, es que el lavado frecuente del cabello es malo, esto es en gran parte falso. Resulta que el lavado no es malo en sí mismo, se puede lavar el cabello tan seguido como se quiera. Sin embargo, lo que realmente influye en el estado del cabello y lo que puede producir daños son los productos usados debido a la resequedad que puede causar. Los champús con cloruro de sodio y sulfato de sodio pueden afectar a las personas con un cuero cabelludo sensible, ya que este tiene un pH alcalino que afecta la fibra capilar. “No debe confundirse una cutícula dañada con un folículo piloso dañado. Mientras que lo primero solo afecta el brillo y la apariencia general del pelo, lo segundo puede desencadenar en la pérdida del mismo”, aclara Arturo Argote

Entre las personas que se maquillan es muy común la creencia que dormir sin maquillaje aumenta las arrugas en la piel, esto es completamente falso. Las arrugas se forman de manera natural y común por el envejecimiento, la piel se va secando y esta pierde su elasticidad, resultando en una formación de pliegues en la piel. Las células que producen y mantienen las proteínas para la piel como el colágeno lentamente pierden su eficiencia. “Cuando nos dejamos el maquillaje en las noches puede que la piel se irrite o que nos dé acné si somos adolescentes. Sin embargo, la aparición de arrugas solo podemos relacionarla con la radiación y la genética. Por esta razón es importante el uso de bloqueador solar diario, no solo para evitar las arrugas y las manchas, sino también para disminuir la probabilidad de desarrollar cáncer de piel”, afirma el doctor Argote.

En Colombia es costumbre bañarse todos los días, por lo que se cree que es saludable para la piel, en realidad esto es en parte falso. La dermatóloga Astrid Ruiz comenta que realmente puede tener el efecto opuesto en ciertas personas. “Existen personas con piel naturalmente seca o sensible a las que se les recomienda tomar duchas cortas (de 5 minutos aproximadamente) con agua tibia. La razón es que el contacto prolongado con el agua tiende a deshidratarla”, señala Ruíz.Además, no se recomienda refregar la piel con esponjas o estropajos, este acelera el proceso de recambio natural de las células, es mucho mejor usar las manos.

Desde hace muchos años se cree erróneamente que los antitranspirantes causan cáncer, especialmente el cáncer de mama. En décadas pasadas algunos estudios médicos sugirieron una relación entre el uso de estos productos y el cáncer. En los últimos años se han publicado estudios como en la revista Crital Reviews in Toxicology que aseguran que no hay una relación entre el uso de productos antitranspirantes con el crecimiento de células cancerosas, especialmente de cáncer de mama.

El último mito, está enfocado en la causa de la caspa, ya que muchas personas están equivocadas al pensar que este es producido por hongos. La dermatóloga Ruíz comenta que “ni los hongos ni la resequedad del cuero cabelludo son la principal causa de la caspa. En realidad, la pitiriasis, como se le conoce médicamente, se produce por enfermedades como psoriasis, eccemas o dermatitis seborreica”. Es importante buscar atención medica ya que la dermatitis seborreica a pesar de ser en parte una condición genética, está relacionada por factores externos como el estrés, cambios hormonales o el clima.

La limpieza corporal es necesaria, lo importante es tener en cuenta los productos y la frecuencia con la que son usados ya que pueden impactar la salud. Comprender la realidad detrás de estos mitos no solo mejora las rutinas de cuidado personal, sino que también permite tomar decisiones informadas. Al seguir las recomendaciones de los especialistas, se puede mantener una piel y un cabello saludables, fortaleciendo así el bienestar general.