María es una artista apasionada, honesta y disciplinada, a través de su voz logra producir canciones cargadas de sentimientos que inspiran. Ya tiene 8 canciones listas, entre ellas: baladas, un poco más pop/rock y otro par medio electrónicas fusionadas con tropical. Con la banda están preparando un repertorio que incluye estos géneros musicales en español y en inglés. María decidió regresar a su querida Colombia, para hacer el lanzamiento de su segundo sencillo, “La Reina”, en honor al amor y los sueños.
“En este momento Colombia es uno de los países más importantes de generación de artistas de talla internacional, por eso decidí regresar a mi país y lanzar mi segundo sencillo, desde aquí, para unirme a las voces de la gente mi tierra y así gritarle al mundo lo grande que somos los colombianos”, sostiene María.
Su trabajo discográfico, “La Reina” tiene un significado muy especial en la vida de María, es la primera vez que la artista co-produce y co-dirige un video musical. Este trabajo discográfico representa el contraste no resuelto entre la ilusión y la realidad, puesto que juega con la idea de lo que se supone que son los príncipes azules en las historias de amor.
“Se basa en el pop latino bailable y se combina con un ritmo influenciado por el reggaetón. Lo que más me gusta es el contraste entre la letra de la canción, sobre un romance fantasioso, y la narración visual de lo que resulta ser el príncipe azul”, afirma la arista colombiana.
“La Reina” fue grabado en una finca en Sopó y en el castillo del Mono Osorio en Bogotá. Para esta producción, el equipo estaba conformado por: Matteo Marcenaro, Esteban Olaya (MyO Media Group) y la artista.
Este segundo sencillo, se lanza en fecha de Halloween porque muchas veces cuando la persona está enamorada está como embrujada. “Me encanta todo lo relacionado con la época medieval, en especial lo gótico, con el título “La Reina” en mente para éste sencillo, pensé que sería divertido crear un escenario medieval para cantar una canción de una ilusión de amor”, explica María.
