POR: @wilsonortizchuchu

Pasan los días y es tan denigrante ver cómo algunas personas, que dicen llamarse periodistas, se prestan para que en los medios de comunicación se hagan publicaciones de algunas figuras que lo único que buscan es exposición pública.

Hoy en día, como cualquier persona se hace llamar «Jefe de Prensa»,  opta por reclutar a algunas mujeres que están siendo patrocinadas por «Marrinos» o  «Marrinas», término ya conocido como mitad marrano y mitad padrino, y enredan a los periodistas vendiéndoles una información que en más de una ocasión lo único que hace es cotizar al personaje para que puedan cobrarles a los patrocinadores tarifas más altas y, por ende, en el mundo de la prostitución tener más clientes que suplan todas sus necesidades.

De cuando acá aparecen unas y unos dizque modelos cotizados en otros países, pero cuando usted  pide soportes de las campañas que hicieron o de las marcas con la que trabajaron ni siquiera saben de ortografía. Es más se descachan por nombrar  países que ni siquiera existen. Claro está que es tarea del periodista verificar dicha información para no ser asaltado en su buena fe.

Ahora, los periodistas de entretenimiento se prestan dizque porque estas chicas desean hacer sus sesiones fotográficas en lugares paradisiacos y los llevan junto a sus acompañantes a cubrir la famosa labor, que se convierte en otra cosa, y el periodista queda comprometido a publicar solo lo que la “famosa” quiere o el “marrino” exige.

De cuándo acá la persona que nos busca para hacer la nota de su representada es quien nos dice qué ha hecho o en qué ha figurado y algunos ni siquiera se toman la molestia de constatar que dicha información sea cierta. LA VERACIDAD no está en el comunicado que nos entregan, está en verificar los antecedentes, una tarea un poco difícil porque ahora con tanta herramienta tecnológica se falsean lugares y se usan los retoques más avanzados, y ahí sí DEL DICHO AL HECHO HAY MUCHO TRECHO.

Las personas que nos leen, nos escucha y nos ven merecen RESPETO y nosotros como periodistas somos solo HERRAMIENTAS para que ellos conozcan una información; y si nos prestamos para esos montajes y engaños, serán las nuevas generaciones quienes evalúen y sepan quiénes son los que denigran nuestra profesión.

La pregunta que debemos hacernos es ¿qué está pasando con los Jefes de Sección, editores y directores de cada medio, pues están permitiendo que los medios se conviertan en herramientas para que dichas figurillas se conviertan EN FAMOSOS a costilla de los periodistas ingenuos, o más bien perezosos; y la tapa, qué me dicen de ellos que hasta reciben una bonificación extra para convertirse en los títeres de los que pagan para ser famosos.

» EL PAPEL ES BUENO Y ES PARTE INTEGRAL DE NUESTRA VIDAS, PROVIENE DE FUENTES RENOVABLES, ES BIODEGRADABLE Y RECICLABLE, ÚSELO CON TRANQUILIDAD».